El Networking estilo Veracruz.

El Networking es una herramienta extraordinaria para generar relaciones públicas y para prospectar nuevos clientes o proveedores potenciales. Sin duda es una de las estrategias que las empresas utilizan a menudo y existen formatos muy bien estructurados y establecidos, con gran éxito en su implementación, tengo la experiencia de un par de agrupaciones que lo realizan con alta efectividad. Su principal enfoque es conocer e identificar a tus posibles clientes y socios comerciales.

Sin embargo ahora conozco un nuevo modelo de Networking y es al estilo Veracruz.

Funciona de la siguiente manera:

Se realiza una reunión con ciertos protocolos de apertura, presentación y comentarios y después … Comienzo a venderte mis productos o servicios. ¿Cómo? ¿Sin conocerte? ¿Sin saber acerca de ti y tu empresa? ¿Sin conocer tus necesidades y expectativas? ¿Sin solicitar una cita? Para al menos aplicar un poco de Rapport y formular un vínculo de empatía y/o confianza. Así es como funciona.

Por otro lado, el networking es crear una red de colaboración entre las empresas que participan, afiliadas o no a una organización, y brindarse beneficios mutuos para generar desarrollo y crecimiento.

Sin embargo la experiencia me enseña día a día que, al menos que pertenezcas al club de Toby de las cámaras empresariales, dicho Networking no genera redes reales de negocio, solo buscan venderte y ya, o en su defecto te buscan para seguir manteniendo sus instalaciones y nómina, siempre que haya billete de por medio funcionan.

Las redes de negocio, que no es lo mismo que negocios en red (¡¡Por favor!!), deben producir un sentimiento de identidad, respaldo de grupo o equipo, generar compras en conjunto o entre los integrantes y esta actividad a su vez debe producir desarrollo local y regional, mismo que detone por consecuencia el desarrollo de los sectores en los que las empresas que formularon el Networking están involucradas y este, a su vez, nos dé mejores oportunidades de expansión, nacional o internacional.

Como todo lo que funciona, se trata de un proceso con valores, reglas y condiciones a cumplir, que de hacerlo bien beneficia no solo a los que estén en el grupo de Networking, sino al entorno en general donde estén ubicados, a pesar de e incluso en contra del status quo.

Como todo lo que suelo evidenciar, también lo acompaño de una propuesta, la mía es la siguiente:

  1. Generemos un grupo de empresas PyME que estén dispuestos a colaborar y beneficiar a sus iguales.
  2. Olvidemos las estructuras sólidas y anquilosadas que producen círculos viciosos para mantener a unos cuentos al mando, así como los pagos de cuotas sin costo-beneficio real y tangible.
  3. Generemos un método de comercialización de nuestros productos y servicios basado en el conocimiento de quienes estamos colaborando y en la confianza de que haremos un trabajo de calidad y a un precio justo.
  4. Generemos conocimiento a los pequeños y medianos empresarios del beneficio que trae consigo comprar a los locales para su economía.
  5. Crear plataformas tecnológicas que permitan el acceso a medios de comercialización masivos para las PyME´s a un precio adecuado a ellos.
  6. Fomentar una cultura basada en la calidad, ya no como un elemento de diferencia, sino como parte integral de lo que oferto.

Hay quienes ya trabajamos en ello y hemos comenzado a ver los resultados en nuestros negocios y en los de los compañeros que se han integrado a SUDE.

Si estás en Veracruz, Boca del Río, Xalapa, Córdoba u Orizaba y te interesa participar no dudes en contactarnos a través de este medio o en las siguientes Redes Sociales (Las redes funcionan, solo hay que enfocarlas):

Muchas gracias por leer y compartir.

MJEL

 

 

Septiembre y sus festejos. 

Y no me refiero a los patrios en México, sino a los festejos de mis 2 equipos favoritos, mi familia y el de CDHE. 

Septiembre siempre ha traído consigo eventos que han cambiado mi vida para bien. 

En el equipo CDHE tenemos 2 celebraciones el cumpleaños de Vanessa y mío, 10 y 9 respectivamente y el 23 CDHE México cumple sus primeros 2 años, aun cuando como empresa existe desde el 2010, fue el 23.09.15 cuando nació la nueva imagen, estructura y enfoque de desarrollo de conocimiento. 

En la familia también celebramos bastante en septiembre, este año mi esposa y yo cumplimos nuestro 9no. aniversario juntos, que dicho sea de paso, ¡Jamás pensé que tuviera tanta tolerancia conmigo! Jajaja 

Como si no tuviera suficiente mi esposa conmigo, hace 3 años, el 9 de septiembre, recibí un regalo inmejorable de su parte, nació como fruto de nuestro amor el pequeño Maximiliano, sin programarlo decidió que ya tenía que estar en este plano y  nacer justo el día de mi cumpleaños. ¿Están de acuerdo que no hay mejor regalo en la vida? 

Así que, haciendo un recuento, tenemos que celebramos en septiembre los días: 7, 9… al cuadrado, 10 y 23. Si además consideramos los días festivos de la Infependencia de México, agréguenle el 15 y 16. 

Por eso la razón del título para está entrada al Blog. 

Gracias por leer, comentar y compartir. 

MJEL 

¿Qué hacer?

Y es pregunta seria, les cuento el tema y espero me compartan la que sería su respuesta o comentarios que puedan enriquecer y/o sirvan de aprendizaje para quien lea el blog y para mi.

La semana pasada se comunica un cliente vía WhatsApp para solicitarme apoyo en conseguir una persona para su departamento de Seguridad y Salud en el trabajo, ya que la persona quien estaba en el puesto renunciaba en términos de atender pendientes personales. En esta ocasión yo no contaba con alguien quien cubriera el perfil, ya que previamente había enviado a un prospecto y este último comentó que por las condiciones y el salario no era de su interés. Yo cumplí con el trámite de enviar a alguien de confianza e intentar resolver una necesidad al cliente.

Regresando al punto, continúo con mis actividades, entre las citas de venta de nuestros servicios y la asesoría a clientes, y durante el diagnóstico a un cliente nuevo me presenta la Analista de proyectos al nuevo practicante … ¡Sorpresa! El chavo que salió de trabajar con mi cliente. Pregunté si se había cumplido con el protocolo de salida y el de ingreso como practicante a través de la vinculación que tenemos con la institución educativa y me confirman haber hecho todo de acuerdo al procedimiento y muestran las evidencias de las cartas de presentación, aceptación, etc.

Acto seguido, escribo al cliente para hacer saber que el chavo es nuestro nuevo practicante y que le apoyaríamos a sacar su proyecto de prácticas rápido, porque nos había pedido apoyo y así terminar sus trámites de carrera y reintegrarse a lo laboral , para que se sintiera con la tranquilidad que la persona estaba con nosotros, por si en algún momento requería algo de él. Su respuesta fue, y cito: «Hola Marcelo. Si está bien – Abrazo» Al día siguiente me vuelve a escribir y me preguntó que significaba liberar residencias con nosotros, que si implicaba que el chavo iba a trabajar cierto número de horas con nosotros, respondí con una pregunta acerca de que si alguna ocasión había tenido personas brindado residencias … Y ahí es cuando la situación cambio completamente y responde: «Estará o no? Porque aquí se fue con mentiras y se me hace poco ético de parte de ustedes llevárselo así» el resto del texto lo omito por ser horario para niños mientras escribo ¦v  Y para terminar cancela el servicio y dice que no le hable así.

Justo ahí viene la pregunta: ¿Qué hacer?

Honestamente no reaccioné bien y terminé por engancharme y dije algo honesto aunque nada objetivo: «Como decidas, finalmente no eres un cliente representativo y tienes mucho que trabajar en lo personal» porque ya previamente me había solicitado apoyo en otros sentidos a título personal porque padece, aceptado por si mismo, de condiciones para liderar una empresa y habíamos generado cierta confianza personal, por eso tiene mi número de celular.

Y reitero la pregunta: ¿Qué hacer? Ante una situación así.

Finalmente al terminar el día y realizar mi tarea de reflexión y gratitud a quienes lo enriquecieron en experiencia noto que:

  1. El cliente no siempre tiene la razón. Pero no debo engancharme con sus reacciones.
  2. Si sabes que tiene antecedentes de producir problemas con sus clientes y proveedores, realiza un análisis de riesgo y de costo-beneficio antes de formular contrato.
  3. Sus comentarios y reacciones hablan más de él, de lo que dice o reclama de ti.
  4. Nunca perder la templanza, aún cuando me señalen de manera personal. Es laboral el tema, debo entender.

Esto confirma la frase que siempre acompaña mi correo: ¡Estoy para adquirir experiencias, aprendizaje y trascender!

Gracias por leer, comentar y compartir.

MJEL